Granito negro: sinónimo de fortaleza, elegancia y sofisticación
El granito, la historia de una fortaleza de 300 millones de años
El granito es parte de la familia de las llamadas rocas ígneas o volcánicas, rocas formadas en altas temperaturas y en condiciones de alta presión en la corteza terrestre en un proceso con una duración de varios millones de años. Las características del granito, así como su tonalidad y el tamaño del grano están determinadas por el tiempo de enfriamiento y por los minerales que componen la piedra, como el feldespato, la mica o el cuarzo, entre otros en menor proporción. Una mayor concentración de cuarzo en el granito aumenta su dureza, que regularmente se encuentra entre 5.5 y 7 en la Escala de Mohs. En el caso del granito negro, su tonalidad oscura proviene de la biotita y de la mica. Se calcula que el granito se formó hace unos 300 millones de años, unos 60 millones de años antes de que los dinosaurios poblaran el planeta.
Debido a su dureza, resistencia y baja porosidad, la explotación y uso del granito se extendió en la Antigüedad, en específico, en la construcción de monumentos. En Egipto, el granito se utilizó en la fabricación de sarcófagos, obeliscos y como revestimiento de las cámaras interiores de las pirámides. Algunas de estas construcciones han perdurado hasta la actualidad.
El granito aún es una de las piedras naturales preferidas para la edificación de monumentos, memoriales y colosales construcciones, como es el caso de algunas secciones de la Sagrada Familia, en Barcelona, del arquitecto catalán Antonio Gaudí, que se espera sea concluida en 2026; el Space Mirror Memorial, en el Centro Espacial Kennedy, un imponente monumento de más de 12 metros de alto por 15 de ancho dedicado a las personas —astronautas y pilotos— que murieron en alguna de las misiones de la agencia espacial. El memorial representa el oscuro espacio simbolizado por un espejo de granito negro pulido.
Un excelente representante en el rubro de las construcciones titánicas de granito es, sin duda, el Monte Rushmore, en Dakota del Sur, obra colosal de Gutzon Borglum, quien esculpió durante casi quince años los rostros de cuatro presidentes de Estados Unidos. Cada figura mide más de 18 metros de altura. Borglum, asimismo, consideró la erosión natural del granito expuesto a la intemperie y trazó las facciones de cada presidente unos centímetros más gruesas, para que, en treinta mil años, los rostros adquieran, por la erosión, su proporción ideal. Una muestra de la fortaleza del granito.
El negro, evocación a la elegancia
El ojo humano tiene la capacidad de apreciar cientos de miles de variaciones cromáticas. Es así como el verde oliva dista —cromáticamente— del verde lima o del verde menta. En la vida diaria, en la generalidad y más allá de las disciplinas y materias que requieren de la especificación puntual, las distintas tonalidades se asocian más a las emociones que evocan que a una precisión cromática.
Sucede, entonces, que el rojo es asociado a la pasión y a la ira; el verde al medioambiente; el naranja al dinamismo; el blanco a la pureza. En el caso del negro, este puede catalogarse como la ausencia de color y no un color en sí mismo, aunque posee sus propias asociaciones y simbolismos. Si bien el negro puede relacionarse a lo funesto, a lo lúgubre; también es verdad que el negro evoca conceptos como la elegancia, la solemnidad y la sofisticación.
Son incontables las marcas comerciales que han elegido el negro como parte fundamental del diseño de su imagen, por ejemplo, marcas de automóviles de lujo, perfumes, firmas de alta costura, diseño de modas, joyerías, entre otras. El color negro es el común denominador en estas marcas de rubros tan dispares, pues buscan apelar a conceptos como la elegancia y la sofisticación, evocaciones que el negro atrae naturalmente.
La sofisticación de los espacios. Características del granito negro
Variedad
Referirse al granito negro es hablar de una familia de granitos con tonalidades que van desde el negro absoluto hasta el gris oscuro, pasando por granitos de distintos diseños y acompañados de destellos blancos, dorados y azules; vetados a mayor o menor medida, con una composición de granos finos o más gruesos. Tal como sucede con las piedras naturales, no existe un solo diseño ni ninguna pieza de granito negro que sea igual a otra.
Entre la familia de granitos negros algunos de los más destacados son el Granito Negro Absoluto Zimbabwe, explotado en este país africano, con una alta densidad y unos tenues destellos blancos; el Granito Negro Galaxy, que recuerda una noche estrellada con tonos dorados, o el Granito Volga Blue, que se reconoce por sus vetas más pronunciadas acompañadas de luces azules.
Baja porosidad
El granito negro es una piedra con una baja porosidad, lo que lo convierte en un material idóneo para recubrimientos de baño y en aplicaciones exteriores, como fachadas o pisos. Si bien siempre se recomienda proteger la piedra con selladores especiales para evitar filtraciones y absorción de humedad, además de una debida instalación profesional, el granito negro se caracteriza por poseer un grado de absorción de agua muy bajo.
Adaptable a cualquier espacio
El granito negro se considera un material espléndido para encimeras de cocina debido a que, a diferencia de otras piedras, el granito no es afectado por ácidos, como el limón o la grasa; la realidad es que el granito negro es una piedra que se ajusta perfectamente tanto a instalaciones interiores como exteriores y a todos los espacios. Gracias a su dureza, es una opción ideal para pisos, paredes y recubrimientos, así como para otros muebles de cocina y baño, como cajoneras o tarjas. El uso decorativo es otra de las variantes del uso e instalación de granito negro. Un borde de granito negro pulido contrasta con pisos de piedra natural con una tonalidad más clara creando ambientes llenos de armonía o, gracias a su resistencia a altas temperaturas, es común encontrarlo como recubrimiento de chimeneas. Incluso, la fabricación de mobiliario con granito negro —mesas de comedor o de centro, desayunadores, barras— es una de las tendencias que mayor crecimiento tiene. Es la sofisticación en cada espacio.
Aislante térmico y acústico
Debido a sus características, el granito negro es una excelente opción como aislante acústico mitigando los sonidos del exterior. Estas mismas cualidades los convierten en un extraordinario aislante térmico, conservando la temperatura más templada, un beneficio que se potencia en las temporadas del año más calientes o frías, lo que se ve reflejado en un ahorro energético.
Plusvalía natural
Los espacios con granito negro son ambientes en donde se disfruta de la armonía en los diseños, la elegancia y la sofisticación, pero, sobre todo, se vive una cercanía con lo natural. A diferencia de los materiales sintéticos, como los cerámicos, la piedra natural, con el mantenimiento adecuado, puede perdurar por mucho más tiempo; lo que se reflejará, en el futuro, en un aumento de la plusvalía de la propiedad. La relación costo-beneficio resultará siempre benéfica al elegir granito negro para la realización de un proyecto.
Fortaleza, elegancia y sofisticación
Las características y cualidades, así como la amplia gama de tonalidades y texturas, hacen del granito negro una de las piedras naturales con mayor demanda en el mercado. Es así como, su dureza, fortalecida durante millones de años, su evidente apelación a la elegancia y su adaptabilidad a los espacios que colma de sofisticación y armonía, convierten en esta piedra en una excelente opción para la ejecución de proyectos.
Razones por las cuales el granito negro es sinónimo de fortaleza, elegancia y sofisticación.
Mármoles Puente, naturalmente tuyo.